El concepto del círculo de limpieza, también conocido como círculo de Sinner, según el propio Sinner, explica el proceso de limpieza. Este círculo está compuesto por cuatro factores fundamentales que desempeñan un papel crucial en la limpieza: tiempo, temperatura, mecánica y productos químicos. Cada uno de estos factores interactúa entre sí, y el círculo permanece cerrado, lo que significa que cuando uno o dos factores se incrementan, los demás se reducen automáticamente. Del mismo modo, si se reduce alguno de los factores, los restantes deben incrementarse para mantener el equilibrio del proceso de limpieza, el cual incluye cualquier herramienta desde limpiadores de vapor hasta hidrolimpiadoras.
Los 4 factores fundamentales de la limpieza
Tiempo: El tiempo de acción y el tiempo de procesamiento son importantes en la limpieza. Un tiempo de acción más prolongado ayuda a ablandar la suciedad persistente y facilita su eliminación. Por ejemplo, dejar una olla en remojo durante más tiempo ayuda a deshacerse de los residuos de comida quemada con mayor facilidad.
Temperatura: La temperatura juega un papel crucial en la limpieza. El uso de agua tibia o caliente ayuda a eliminar mejor la suciedad aceitosa, grasienta o cerosa. Además, altas temperaturas facilitan la disolución de otros tipos de suciedad, reduciendo el tiempo de acción y de procesamiento. Esto a su vez requiere menos esfuerzo mecánico y menos productos químicos.
Mecánica: La fuerza mecánica necesaria para eliminar la suciedad se compone de diferentes elementos, como la abrasión, la presión de contacto y la frecuencia del movimiento. Por ejemplo, una esponja de acero es abrasiva, pero puede dañar superficies delicadas, mientras que un paño suave requiere más presión y movimientos repetidos para lograr una limpieza completa. El uso de una limpiadora de vapor, por ejemplo, también conlleva una mecánica más suave.
Productos químicos: La elección adecuada de los detergentes desempeña un papel crucial en muchas tareas de limpieza. En algunos casos, solo el uso de productos químicos puede eliminar la suciedad de manera efectiva. Además, los productos químicos pueden reducir la tensión superficial del agua, permitiendo que la solución limpiadora penetre en grietas y poros más finos.
El círculo de Sinner en la práctica
El círculo de Sinner es ampliamente utilizado en el ámbito de las empresas de limpieza de edificios, pero sus principios básicos también son aplicables en las tareas de limpieza diaria en el hogar. Es importante mantener un equilibrio entre los factores de limpieza para obtener los mejores resultados.
Programa de lavado Eco: Las lavadoras modernas cuentan con programas Eco que prolongan la duración del ciclo de lavado y reducen la temperatura. Esto permite lograr un nivel de limpieza similar con un menor consumo energético.
Limpiadores de vapor: Las limpiadoras de vapor utilizan vapor caliente como agente de limpieza principal. Estas máquinas requieren poca ayuda mecánica y en muchos casos prescinden por completo de los detergentes químicos.
Hidrolimpiadora: Las hidrolimpiadoras generan un fuerte efecto mecánico y logran excelentes resultados de limpieza en muchos casos sin depender de los otros factores. La velocidad de trabajo se ajusta según la cantidad de suciedad, y en ocasiones se pueden utilizar detergentes especiales para potenciar el efecto de limpieza.
En resumen, el círculo de Sinner y sus principios básicos son fundamentales en el proceso de limpieza. Comprender y aplicar adecuadamente estos factores puede ayudar a obtener resultados eficientes y efectivos tanto en entornos comerciales como en el hogar.
